La advertencia de Confesercenti: “2024, un año para olvidar: 61 mil comercios cerrados”
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MILÁN – Un año para olvidar para el sector minorista. Según un análisis de Confesercenti , entre enero y diciembre solo 23.188 nuevas empresas del sector minorista abrieron sus puertas, mientras que 61.634 cerraron definitivamente: una proporción cercana a 1 apertura por cada 3 cierres, la peor de los últimos diez años. Así se desprende de un análisis realizado por Confesercenti sobre los datos de la Cámara de Comercio. La desaceleración del consumo, la falta de crédito y la curva demográfica pesan mucho. Si la tendencia no se revierte, advierten los traders, existe el riesgo de llegar a cero aperturas ya en 2034.
"La desertificación comercial es un problema enorme tanto a nivel económico como social. Lamentablemente, hasta ahora se ha hecho poco o nada para frenar la desaparición de los pequeños comercios", subraya Patrizia De Luise, presidenta nacional de Confesercenti. "La perspectiva cada vez más concreta es que el canal de distribución que ha dado a conocer nuestros productos en todo el mundo quede definitivamente marginado. El riesgo es que el control total de la distribución comercial pase a manos de unos pocos monopolistas y de las grandes multinacionales que dominan las plataformas online. Esto también sería perjudicial para los consumidores".
La encuesta destaca cómo la crisis de natalidad en el comercio es ahora un fenómeno estructural: en 2014, se registraron 43.324 vacantes, equivalentes a poco más de 118 por día, mientras que en 2024, la tasa diaria de inscripciones bajó a 63,5, casi la mitad. Un colapso que se ha vuelto cada vez más rápido a partir de 2020: si la tendencia de los últimos cuatro años continúa sin revertirse, ya en 2034 el número de nuevas aperturas podría reducirse a cero, lo que marcaría el fin del comercio tal como lo conocemos. Sin un mayor cambio generacional, la desaparición progresiva del comercio independiente de los centros urbanos sería de hecho inevitable.
Sin embargo, la dinámica de los ceses también es preocupante. Mientras que las inscripciones están disminuyendo, los cierres de tiendas continúan aumentando, por cuarto año consecutivo. En 2024, aproximadamente 169 empresas cerraron sus puertas cada día, en comparación con 139 en 2020, el año del Covid. Un aumento que acerca la relación entre cierres y nuevas matriculaciones a 3 a 1 (2,7): en 2014, era de 1,5 a 1.
Aunque la tendencia negativa se observa en todo el país, en algunas regiones el proceso de desertificación comercial –es decir, la desaparición de los comercios de barrio– está más avanzado. En particular, la peor relación entre nuevas aperturas y cierres de empresas (1 a 4) se registra en la región de Marcas: para esta región, el riesgo de cero aperturas se adelanta a 2031. Le siguen en la clasificación negativa Sicilia (una nueva apertura cada 3,8 cierres), Lacio (1 a 3,7), Cerdeña (1 a 3,5) y Umbría (1 a 3,2).
El envejecimiento progresivo de la población se refleja también en el sistema empresarial: entre 2014 y hoy, en todos los sectores de actividad, han desaparecido más de 153 mil actividades de menores de 35 años, de las que casi la mitad -66 mil- en el comercio. Sin embargo, según Confesercenti, las mayores dificultades para los comercios también surgen de un crédito cada vez más asfixiante y de un mercado difícil, tanto por la "lenta" recuperación del consumo familiar como por el aumento de la competencia, con un panorama cada vez más dominado por grandes grupos y gigantes online.
repubblica